sábado, 6 de diciembre de 2014

Chulazos Temáticos. Labios divididos (I)

¡Ay ay ay! Chuchis, que dejar el blog abandonado y volver un mes después, es entrarme una nostalgia al hacer este tipo de post que ni os lo imagináis. Llevaba mucho tiempo sin hacer uno sobre mis chulazos temáticos, esa sección tan polémica pero que a la vez tanto os gusta, que lo sé. En esta ocasión la he titulado, labios divididos, pedazo morros que dan ganas de comérselos. Claro, que cuándo ponga a gente besándose, le llamaré labios compartidos, por hacer ese guiño a Maná. Os dejo con los chulazos de esta semana. A ver qué os parecen.

El de la cara de bueno

El mulato de los ojazos

El despreocupado

El de la cara de bueno por segunda vez

El de las cejas depiladas

El deportista mulato

El inglés

El mulatazo

El que no se me ha colado

El chico Martini

El de los ojazos

Y la próxima semana ya veremos, que no me ha dado tiempo a elegir la temática de los próximos chulazos temáticos.


viernes, 5 de diciembre de 2014

FNF Nº 220

Estamos que lo damos todo, chuchis, y es que llega el puente de la Inmaculada, o el de la Constitución, según se vea, y además de esto, los hay que empiezan hoy las vacaciones y pretenden hacerlo por todo lo alto. Por eso os dejo un temazo, pero un temazo como dios manda, muy bailón, así os lo digo, y potente, muy potente, algo de mediados de los noventa que a día de hoy no ha quedado nada desfasado, Faithless, y el tema con el que sonaron por medio mundo, Insomnia.



Espero que lo paséis al menos, la mitad de lo bien que me lo voy a pasar yo, avisados quedáis.

lunes, 1 de diciembre de 2014

Día Mundial de la lucha contra el sida

Chuchis, que he estado fuera unos días, un mes liado con mis cosas, mis proyectos de bloguero diva de los que no se debe hablar por aquí por preservar un poco la intimidad y porque de los proyectos, las estrellas no hablamos, que se estropean, pero que no os he olvidado, que lo sepáis ya, y que hoy os traigo un post institucional, como toca. Porque si alguno no se ha enterado todavía, hoy se celebra el día mundial de la lucha contra el sida.
 
Porque parece que ya no, que ya no existe el día, o que ha perdido fuerza porque en la entrada al trabajo ya no te dejan la bandeja llena de alfileres con el lacito rojo para lucir este día, para recordar a la gente la importancia de la lucha contra el sida y el vih, porque muchas veces la voracidad informativa se come temas que no son para nada triviales. Hoy, todo el mundo está hablando de la violencia en el fútbol, y los medios recordarán vagamente el día mundial de la lucha contra el sida, que será recordado por los actos que las asociaciones más especializadas en la lucha contra este problema. Es que, aunque parezca que el día ya no es, que sea quizá menos importante, que los tratamientos han avanzado mucho, que se haya convertido en una enfermedad casi crónica, no es así, aunque pensemos que el ébola es ahora la enfermedad de moda que más urgencia y atenciones requiere, el vih sigue ahí, y sigue avanzando, lentamente, a su velocidad, pero sigue afectando a miles de personas, al menos en España.
 
Y un año más, recordar la importancia de dos aspectos muy importantes, hacerse la prueba a tiempo y periódicamente, y por otro lado la prevención, traducida en el uso de protección a la hora de tener relaciones sexuales (excluyo del post de hoy otros modos de transmisión que no sean los sexuales, también a tener en cuenta, pero que ya no son la principal causa). Un amigo me comentaba hace unos días que en Madrid están todos locos, que la gente era muy apelera en la capital, y que había que tener mucho cuidado, y así es que muchos se han apuntado a la moda del bareback, del apelo, y nadie se ha parado a pensar en las consecuencias. Yo no sé los locos que actúan así, en qué se basan para hacerlo, o que especie de inconsciencia pasa por su mente, o mejor dicho, lo que no pasa por sus cabezas, y de lo que conlleva el vih. Efectivamente, un día salta la alarma, el temido resultado positivo que te hunde anímicamente y que cambia tu vida para siempre, el que te raya, el que hace que te replantees todas y cada una de tus experiencias sexuales el resto de tu vida, el que te tiene en tensión preocupándote por tu pareja, y después, los médicos, los tratamientos, y lo peor de todo, el estigma de la sociedad que todavía sigue discriminando a las personas con vih, al punto de obligarlos a estar en muchas ocasiones, en un nuevo armario. Yo me lo pensaría, y todo por un instante de placer que no creo que valga la pena.
 
Hoy no me quiero extender sobre un tema del que ya he hablado en numerosas ocasiones, repetir una vez más, prevención y pruebas, para no verte en un fregao con el que no contabas, y después, comprensión e información, comprensión con aquellos que están en una situación en la que, por qué no, podrías estar tú en cualquier momento, e información para que, esta nueva forma de plantearte la vida, por lo que te cambia, no acabe contigo psicológicamente, que es quizá la peor secuela y de la que menos se habla.