Pues cual Cristo resucitado aparezco hoy por mi propio blog, tras una semana santa pasada de vacaciones pasadas por agua, eso si, unas vacaciones muy intensas, pese a todo, en cualquier caso, es un Pimpf Resurrection en toda regla, que no va a ser Cristo el único.
Una visita de vez en cuando a Galicia no viene nada mal, y aunque sea una visita una vez al mes tampoco, cada vez veo mi casa un poco más ajena a mi, todo es alegría cuando vuelves por casa, tus cosas permanecen allí, intactas pese a que tú no las utilizas, te acomodas, como siempre, pero ya no vives allí, eres el invitado, y como invitado toca también hacer las visitas a todos los que han quedado por estas fechas en el pueblo. Con la familia he estado con toda, especialmente con los abuelos, de los que tenía ya mono, y debo reconocer que ellos también lo tenían de mi y con los amigos. Bueno, lo de los amigos en este tipo de vacaciones es un poco distinto. Un 65 por ciento de los amigos han estado fuera estos días, haciendo turismo por el mundo adelante, París, Alemania, turismo interior por España, Portugal, ha habido para todos los gustos por lo que me he visto un poco tirado, sin apenas ganas de salir, y con mucho mono de volver a Madrid, a hacer mi rutina habitual, vuelta a hacer ejercicio, pues, al parecer la dieta ha estado dando resultado, a tenor de los comentarios de esa gente que te quiere, y también de los que te quieren menos, cada vez que te ven más gordo, es porque estás más delgado.
Sin embargo, todo el fin de semana ha revoloteado en el aire una palabra, paternidad. Ha sido un constante desde que me he ido hasta que he llegado. Viajar con una embarazada hace que el monotema sea el embarazo, los niños, los nombres, los cochecitos, la ropita, el bautizo si es que lo hubiere, las ecografías, los parecidos, otra vez los nombres. Seis horas de viaje interminables hablando de lo mismo. Pero es que al llegar a casa el tema es similar, porque te preguntan por la embarazada, porque hace mes y medio ha nacido un nuevo primito, que también es otro bebé, que tiene gases, que tiene mucho pelo, que se parece al padre pero que sus ojos son los de la madre. ¿Y tú, cuándo te animas? Pues me encantaría, pero ¿con quién? Te vas a tomar un café con los pocos amigos que te quedan estos días, y claro, una de tus mejores amigas ha sido madre recientemente, el tema de conversación, podéis adivinarlo. Por fin me encuentro con una amiga, en crisis sentimental, alguien que sé que no está embarazada y por el momento ni lo piensa. Ella se queja, la han invitado a una cena con dos de sus mejores amigas y sus novios, ambas embarazadas y ella en el medio. Vale, no hace falta que diga que no han hablado para nada de Bárcenas, ni de los sobres, ni tan siquiera de los amigos narcotraficantes del presidente de la Xunta de Galicia. Al día siguiente, esta amiga, se iba a ver a su prima, tiene nuestra edad y ya tres niños, claro, el tema de conversación son los niños.
He vuelto muy saturado con el tema de la paternidad, en una semana santa, que teníamos que haber estado hablando de Ben-Hur, de la resurrección, del nuevo párroco, pues no, y cuando a uno le encantan los niños, cuando uno de sus mayores deseos es ser padre, cuándo en el futuro cercano y en el lejano empieza a no ver la paternidad, hay temas que gastan, por lo que necesito unos días de tranquilidad madrileña, pensando solamente en lo que tengo que hacer para comer, en el tiempo que hace, en el blog, en el post sobre los niños, en el nombre que tendría el niño. ¿Lo veis? Si es que al final, el tema sale por si solo.
¿Resurrección o pasión?
"Paternidad" el monotema xD.
ResponderEliminarMientras te lo pasaras bien en tu pueblo, pues que importa lo demás.
Salu2.
Con lo bien que se está en el pueblo y hace mal tiempo.
ResponderEliminarYo no sé, pero creo que hay "indirectas" en este post :P.
Un abrazo chiquitín !!.
Ñeee, me pasa parecido, todo el mundo, todos mis conocidos están con el baby boom y de vez en cuando sale la preguntita...pero yo me hago a la idea de no ser padre, que además de ser una gran responsabilidad es una forma muy aburrida de despilfarrar dinero jejejee. Que bueno que tuvieras una semana santa familiar, yo también, pero porque vinieron mis padres! :P. Cariños.
ResponderEliminarPues todos nos hemos alejado por estos feriados. Como es eso de que mientras más te dicen que estas gordo, ¿es que estas delgado? Jajaja debo de estar delgadisisimo! Jajaja Bueno a mi cada temporada me dan ataques de paternidad, pero afortunadamente se me pasan rápido es que con los carísimos que son! Uuuf! Siempre he pensado que mostrar las cuentas y facturas solamente de las vacunas podría ser utilizado como método anticonceptivo eficaz! Jajajaja Un abrazote! Si tienes un hijito nos cuentas!!
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo con lo de ser un invitado en casa de tus padres. Sí, tu habitación sigue igual, y con casi todas las cosas (hasta que no tenga un piso propio no pienso llevarme todo), pero no es tu casa. ¡Y ahora que me he acostumbrado a vivir solo, es terrible tener a tu madre todo el día detrás!
ResponderEliminarDe la paternidad mejor no hablo, que tengo días.