Principio y final de los Chunguitos

Lo de Telecinco es de traca. Nadie lo vemos, a todos nos parece una basura y siempre estamos hablando de ese canal. Pues va a resultar que Telecinco es un canal de entretenimiento puro y duro que sabe dar al público lo que el público demanda, telebasura, y precisamente fruto de esta telebasura aparece Gran Hermano VIP, que es una versión del clásico Gran Hermano pero con Belén Esteban a todas horas. Algo insufrible, ya os lo digo.

 

Y digo que siempre estamos hablando de ese canal, porque la noticia ayer en España, mucho más importante que cualquier movimiento de Podemos, las futuras elecciones catalanas o los intentos del Partido Popular por frenar el terrorismo y de paso intervenir en ese derecho tan importante que nos hemos ganado lo españoles, el de la libertad; la noticia fue la expulsión por parte de MediaSet del mencionado programa reallity de Los Chunguitos, los concursantes graciosillos, y su expulsión fue por comportamiento homófobo y xenófobo. Que tiene tela que a unos gitanos los expulsen por xenófobos.

 

Los Chunguitos comenzaron su andadura allá por los años setenta, a principios, su estilo, la rumba gitana y la canción melódica, y su éxito en aquella época se debía al contenido de sus temas que trataban sobre drogas, pobreza y marginalidad. Su salto a la fama se debe al tema Dame Veneno, pero después de este tuvieron otros que incluso sonaban en los años ochenta. Y poco a poco, el trío de los hermanos Salazar se fue apagando. Primero con el fallecimiento de uno de sus miembros, y después con el olvido de este tipo de música. Ya convertidos en dúo y sin muchas expectativas de futuro comenzaron a hacer apariciones en programas de televisión. Y volvieron a sonar sus temas de antes, aunque mucho menos, y volvieron a ser reconocidos y conocidos por una generación que ignoraba su existencia, a muchos incluso nos recordaron otra vez que existían. Y tuvieron cierto éxito en sus colaboraciones televisivas. Eran un dúo gitano, dos hermanos ya maduritos con cierta gracia, un poco por brutos o por incultos que te aseguraban cierta gracia con algunos de sus comentarios, pero todo tiene sus límites, y aquí fue cuándo llegó Gran Hermano VIP.

 

Cuándo el programa llevaba tan solo cuatro días de emisión, las 24 horas con Los Chunguitos han mostrado la realidad, lo que hay detrás de los personajes, la máscara que uno se quita cuándo hay 24 horas de cámaras emitiendo, y aquí fue cuándo salió el chunguito chungo, el racista y homófobo. Tras cierto revuelo por llamar "mono" a un concursante negro vinieron los comentarios hacia los "maricones". Fue en una comida, charlando distendidamente con algún concursante homosexual cuándo José dijo "a nadie en este planeta le gustaría tener un hijo maricón" y añadió "prefiero tener un hijo deforme o con alguna enfermedad antes que sea maricón", incluso dijo que "según las leyes gitanas ser homosexual era un delito". Continuaron comiendo ante el asombro de Víctor Sandoval. Y continuó el programa como quién no quiere la cosa. Fuera de la casa el revuelo fue impresionante, y desde el primer momento se empezó a pedir las cabezas de los concursantes. A media tarde de ayer, MediaSet en un Twitter anunciaba la expulsión de los exconcursantes, fulminante o no tan fulminante, que eso es tema de análisis.

 

MediaSet esperó a que los concursantes abandonasen el concurso en horario de su gala semanal, emitió las imágenes desafortunadas y dieron voz a los Chunguitos para que se explicasen, reconociesen lo que habían hecho, y para que se disculpasen. Y los chunguitos, cariacontecidos se disculparon una y mil veces, lo que les valió que MediaSet levantase un poco el pie del acelerador y les permitiese estar en las galas del programa como comentaristas. No está mal el premio por humillar a tanta gente que ha sufrido y está sufriendo por el rechazo de los demás, en un momento en el que las agresiones hacia homosexuales están aumentando en España, llegan estos dos señores y fomentan un poco más ese odio. Pero mirad, se han ganado su puesto de colaboradores, y ahí han estado en su primera noche fuera del concurso, eso si, sin volver a abrir la boca en toda la noche. Y es que quizá Los Chunguitos hayan comprendido que, es más correcto en ocasiones no decir nada que volver a meter la pata sin saber muy bien a quién se está ofendiendo, o lo que es peor, que quizá la expulsión llevase a revocar todos los contratos de los hermanos Salazar con la cadena en cuestión, y ya se sabe que cuándo hablamos de dinero, las cosas cambian aunque la mentalidad siga siendo la misma.