Y una semana más, podría haber dicho "no podía con ... José Mourinho", pero me he contenido, porque sigue con vida, que yo mal en ese sentido no se lo deseo a casi nadie, pero no os voy a negar que estoy encantado con que Florentino Pérez, el ínclito presidente del Real Madrid haya decidido rescindir el contrato de su entrenador de fútbol.
Que conste que no es que tenga ganas de hacer un post futbolero, ni de aprovechar este nuevo año en blanco del también blanco club madridista, ni que quiera salir de la fuente de Neptuno para celebrar el título copero del Atlético de Madrid en la final de la copa del rey. Más que nada porque sé que vosotros futboleros, lo que se dice futboleros lo sois poco, más bien os mueve más el tema mariconil, pero el fútbol escasamente, y es una pena, aunque tampoco quisiera futbolear el blog, que no es mi intención, pero si puedo dedicarle un post a José Mourinho, esa especie de personaje que se cree cogido de la mano de Dios o mejor dicho, que mismamente se cree el dios del fútbol. Cari, curas de humildad te ha dado el madridismo (y problemas, y dolores de cabeza) este año, y yo, lo celebro, y sinceramente, si fuese madridista, lo estaría también celebrando.
Todavía recuerdo a un FC Barcelona en horas muy bajas cuándo fichó a Sir Bobby Robson, que Dios lo tenga en su gloria, todo un caballero inglés del fútbol, un galán capaz de tirar los tejos a la mismísima Carmen Sevilla, un gentlemen que dirían los ingleses, un entrenador que consiguió una copa del rey, una Supercopa de España y una Recopa de Europa cuándo nadie esperaba demasiado de su equipo, un señor que asumió las derrotas y el paso efímero en un club. Me viene a la cabeza Vicente Del Bosque, seleccionador español en la actualidad, un hombre que lo ha conseguido todo en fútbol tanto como futbolista como entrenador, y que tanto en las victorias como en las derrotas ha sabido dar siempre la cara. He recordado a otros tantos entrenadores que se han limitado a entrenar, dirigir a sus equipos, ganar, perder, empatar, lidiar con las estrellas de los equipos, en ocasiones perder los nervios con los árbitros, pero lo que no había visto jamás es el entrenador prepotente-cabreador constantemente, y Mourinho ha sido uno de esos.
A pesar de conseguir tres títulos en tres años, de conseguir la espectacular liga pasada con record de puntos, de goles, de presupuesto, de conseguir este año ser segundo en liga, finalista de copa del rey y semifinalista en Europa, y una Supercopa, su balance como entrenador madridista es muy pobre, para lo que se supone el club de fútbol más grande de la historia, lo que le ha supuesto enemistarse con la prensa, con su presidente, tener al segundo entrenador hasta las pelotas, al capitan del equipo y media plantilla en contra, al seleccionador nacional y a todo el mundo en general, encabritados con él, por sus desplantes, insultos, sus verdades, su forma de entender el fútbol, de concebir su propio ego como el mejor entrenador del mundo, su negativa a reconocer mejores a algunos rvales, su mal perder, sus excusas y su forma de echar balones fuera cuándo algo no le interesaba, su forma de presumir de sus excelencias. Vamos, que no me ha gustado nada, sorry.
Y lo peor de todo, es que creo que detrás de Mourinho, creo que hay un barcelonista camuflado. El que en su día fuera segundo de Robson (del que no aprendió demasiado, sobre todo en cuánto a formas), creo que ha estado en Madrid para deshacer desde dentro el club blanco.
Pues a mi me caía bien y la gente lo va echar de menos... Al parecer Casillas & Cía consiguieron lo que querían.
ResponderEliminarUn abrazo chiquitín !!.
Jaja, si, sobre todo su actitud chulesca... Hombre, teniendo en cuenta qué el fútbol es espectáculo....
EliminarBicos ricos
a mi me pone Pep Guardiola, ese pelado si que pone, uhmmm
ResponderEliminarhambre
me lo como
con zapato y todo
pelao rico
Hombre, por poner... Por presencia, por elegancia y saber estar.. Y por ser quien es en el Barcelona... Yo tb me quedo con Guardiola.
EliminarBicos ricos
Menudo bocas, confundió siempre la seguridad y la firmeza con la presunción y humildad... la verdad, más bien poca. A la mierda Mou. Besotes.
ResponderEliminarUno menos, no se si quedaremos más a gusto en Madrid o Barcelona.
ResponderEliminarBicos ricos
Nunca me cayó bien, con eso de que llegó a reemplazar a Pellegrini, pero además, su forma de ser, sus comentarios es un "Puaj" total. Que gusto volver a leerte, no he tenido tiempo de pasar por acá (o de escribir en mi blog), espero pronto darme un atracón pimpfístico. Por cierto, sí faltó mucho en mi post de los besitos, pero creó que la idea se entendió bastante bien...cariños.
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