Hemos puesto al muchacho a trabajar

Si hay alguien que está de moda estos días en todos los titulares en España, ese es Pedro Sánchez. Que no, tontos, que el titular principal se lo ha llevado el ex presidente de la Generalitat, Jordi Pujol por sus historias estas de sus cuentas en Suiza en la época en que estuvo gobernando Cataluña. Pero realmente el post, pese a este inciso sí es sobre Peddro Sánchez, el nuevo secretario general del PSOE.

 

Y es que ahora que todo el mundo se va de vacaciones, hemos puesto al chico a trabajar, y a trabajar de lo lindo. Tras su nombramiento como secretario general del partido el pasado fin de semana, en congreso extraordinario, el que había sido votado por los militantes para ejercer el más alto cargo dentro del partido, ahora le ha tocado formar gobierno y esto no es nada fácil, en un tan fracturado PSOE. Por eso, Pedro Sánchez, ha tenido que lidiar internamente con todos, hablar por aquí y por allí, agradecer a muchos que lo apoyaron y como consecuencia, dar el paso a su ejecutiva a las distintas facciones del partido. Y esto ha terminado ser la casa de TócameRoque, así os lo digo, porque en su ejecutiva hay cuarenta y pico militantes, en su gran mayoría vocales, pero en las distintas direcciones ha puesto a gente de diversa índole y de su gusto, en su gran mayoría jóvenes, y bastantes mujeres, muchos rostros nuevos, y la inclusión de algunos de antes, pero no de los megacasposos de antes, no, ha sabido quedarse con los mejor vistos desde fuera, como por ejemplo, Pedro Zerolo.

 

Y ya con la ejecutiva montada, puestos todos a trabajar, el secretario general del partido, al que de ahora en adelante, en honor a Ángel, llamaremos "el guaperas" se ha enfundado de traje y corbata para convertirse en el líder de la oposición, un hombre de estado que tiene que proponer las primeras medidas dentro del partido y realizar los primeros movimientos fuera del mismo. Sobre el partido, se ha puesto un poco las pilas en cuánto a trasparencia de los datos económicos del PSOE, en la consabida regeneración de la que tanto se ha hablado y que tantas voces dentro y fuera del mismo pedían. El cambio ya está aquí.

 

Sobre su trabajo de cara afuera, ya ha tenido su primer encuentro con Rajoy, el presidente, y ya han destacado sus puntos en común y todo lo que los desune, que no es poco. Hoy, su agenda, además de aparecer en todos los medios informativos, también ha sido un encuentro con el rey Felipe VI, en el que se han puesto un poco las pilas. Tampoco he escuchado cuál ha sido su opìnión al respecto.

 

El caso es que nuestro Pedro Sánchez, este año se nos ha quedado sin vacaciones, y todo para hacer visible su labor al frente del partido, para empezar a definir todo aquello que necesitamos los socialistas para volver a gobernar, y dejar ya de una vez por todas de lamentarnos y lamernos las heridas de las derrotas de los últimos años.

 

¡Ahora, ya no hay Zapateros que valgan ni Rubalcabas que nos entorpezcan!