martes, 28 de octubre de 2014

Ruta por Segovia

Chuchis, este fin de semana he hecho un pequeño y ligero paréntesis en mis estudios (porque lo de ser gafapasta multicultural renacentista no es nada fácil y hay que seguir alimentando conocimientos de forma continua) y allá me he ido a hacer una pequeña ruta por tierras próximas a la capital y que hasta el momento me eran totalmente desconocidas. Los destinos elegidos, cuatro pueblecitos de la provincia de Segovia, cuatro pequeñas joyas y cada uno por lo suyo fueron Riaza, Sepúlveda, Turégano y Pedraza, para finalizar la ruta en un recorrido rápido por Segovia capital. ¿Solo? No, si ya sabía yo que preguntaríais eso. Pues no, uno no hace escapadas solo, y menos hace noche fuera solo, la compañía, la mejor de las posibles, aquel que me aguanta mis rarezas, que no es poco.

Riaza es un pueblecito al este de la provincia de Segovia, muy próximo a la provincia de Guadalajara, es un pueblaco que en invierno tiene que tener cierta gracia, muy cuidado a la par que muy abandonado, muchas casas en venta y un enorme parque con una ermita en el medio en el que no hemos parado, porque nos hemos ido directos a su plaza mayor que tiene la gracia de ser un coso taurino para las fiestas del pueblo, porque por estas zonas son todos muy taurinos, cosa que muchos no entendemos muy bien. La placita es bonita, ya os lo digo, con unos soportales muy chulos.


Casa abandonada en Riaza
 
Casa Consistorial de Riaza


Detalle de Puerta
Y el segundo punto de la ruta era el pueblo de Sepúlveda, situado en el vado del río Duratón que todos conoceréis, un pueblo con una carretera chiquita y que ya os lo digo, tiene su complicación para circular con él, porque no está nada ordenado para la circulación. El pueblo tiene su gracia castellana, es bonito y su plaza mayor de forma irregular muy bonita, con suss soportales, parte de una muralla, un reloj y un campanario, muchísimos detalles tiradores de puertas, cerraduras, vigas y demás. Comer por estos sitios ya os lo digo, complicado si estáis acostumbrados al Big Mac de toda la vida, pero siempre habrá un menú del día de los de toda la vida a veinte o veinticuatro euros, y ya por 36 un menú degustación. El pueblo se corona por una iglesia románica cerrada y saliendo de lo que se supone que fue su muralla otra iglesia más románica pero más nueva, a su lado un mirador precioso al río duratón y su vado, que también se puede visitar pero que, por problemas de agenda no pudimos.


Plaza Mayor de Sepúlveda, vista nocturna


El chalecito en Sepúlveda


Iglesia de la Virgen de la Peña


Vado del río Duratón


Campanario Iglesia Virgen de la Peña


Cerraduras
 
Callejuela de Sepúlveda

Iglesia de San Salvador
 
Plaza Mayor de Sepúlveda
El tercer destino de la ruta era una villa en la que no teníamos muchas esperanzas de que nos gustase, pequeño ya os lo digo y coronado por un castillo en lo alto. La ruta elegida nos hizo llegar al pueblo por la parte posterior del castillo, era Turégano, una villa también anquilosada en el tiempo, con el castillo torroto en lo alto y desde su torre del homenaje puedes disfrutar unas vistas preciosas a una de estas villas que tuvieron su importancia en la historia (a un nivel mucho menor que mi pueblo gallego). Si vais al castillo, ya os lo digo, tiene en el medio una capilla torrota también y abandonada y en lo alto, cuidado con las escaleras, hay riesgo de darse un golpe en la cabeza.


Castillo de Turégano


Castillo de Turégano de cerca


Vistas de Turégano con la plaza mayor en el medio


Cardo
 
Monumento Turégano
La ruta tornaba ya casi a su fin, y el partido del Real Madrid - FC Barcelona estaba próximo a comenzar, el destino, la villa medieval de Pedraza. Pedraza es bonito, ya os lo digo, nada que ver con mi pueblo pero bonito. Me ha recordado en algo a Santillana del Mar, en ese toque de pueblo antiguo para el turismo, una especie de gran decorado medieval dónde apenas hay vida más allá de los visitantes, no vi ninguna farmacia, ningún supermercado, ni una oficina de correos, ya os lo digo. Eso si, la ciudad amurallada con una sola entrada que hace las veces de salida también. Un par de iglesias y un castillo al fondo dónde te salen unas fotos muy bonitas y dónde meses atrás se rodó una de las pruebas de Masterchef. La plaza mayor preciosa.

Castillo de Pedraza


El robado del viaje


Castillo de Pedraza


Entrada a la Villa de Pedraza


Callejuela de Pedraza


Plaza Mayor de Pedraza
 
Plaza Mayor de Pedraza
Y ya sí terminaba la ruta, pero parece que habían ganas de más, así que tuvimos que poner el fin de la escapada en Segovia capital, porque pasar al lado de Segovia y no parar tiene delito, no ver ese gran monumento que los romanos ingeniosamente crearon para que dos mil años después pasasen los coches por él tiene tela. Pero también merece la pena un largo paseo, con pérdida incluida para visitar el Alcázar, al menos desde fuera, y es que ese edificio tiene mucha historia a sus espaldas, entre ella el haber sido residencia de los Reyes Católicos, y a unos metros de allí la plaza mayor con sus soportales y la catedral de Segovia muy iluminada, a escasos metros, la iglesia dónde se coronó a Isabel I reina de Castilla.


Acueducto de Segovia desde la base


Acueducto de Segovia desde lo alto


Detalle de la Puerta de la Claustra
 
Alcázar de Segovia dónde residieron los Católicos
Y ya está, ya os informaré de la próxima salida, y a lo mejor, quién sabe, de alguna salida anterior.

6 comentarios:

  1. ¿Y no te acordaste de mí al pasar por mi ciudad natal?

    Bicos.

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  2. vaya imágenes, te hacen trasladarte a otra época!

    Saludos Sr. Pimpf :)

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  3. esta requete chulo!! yo quiero conocer!

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  4. Muy chulas las fotos. ¿Comiste el cochinillo de rigor?

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  5. Quiero conocer las Castillas, que solo conocí el norte y el sur y Madrid.

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  6. Muy apetecible... Sólo conozco la capi... Y me encantan los pueblitos Castellanos... Besotes.

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