Aguirre sin un "puto duro"

Leo en prensa nada más comenzar el día y después de ver religiosamente el segundo encierro de los Sanfermines a cargo de la ganadería gaditana Cebada Gago y que han dejado un herido por asta de toro, que el gobierno de Madrid "no tiene ni un puto duro", que es otro tipo de cornada, pero más fina.

Así como lo he leído, lo he podido escuchar, porque Esperanza Aguirre ha sido sorprendida por no sé que micrófonos abiertos comentándole al alcalde madrileño que en la Comunidad de Madrid no había ni un puto duro, y esto la verdad que no tiene nada de sorprendente y menos con la que está cayendo, si no fuera porque yo en este blog no hablo ni de mi vida privada ni de política, como bien sabeis.

Claro, yo bien podría hacer ahora mismo un paralelismo entre mi situación y la de la Comunidad y es que ambos estamos sin un puto duro (o euro, para ser más exactos, que ya somos de la zona euro). Que unos ladrones de guante fino hayan tenido los huevos de entrar en la cocina de mi casa, arriesgándose a resbalar con la grasa que puede haber incrustada en la cocina, pasearse por el pasillo con los ronquidos de Gordi e incluso ver su imagen de "Bella Durmiente" en calzoncillos tiene más que delito. Y cuando digo lo de la grasa no es broma, que mismamente ayer, Gordi se ha currado una carne a la plancha sin cortarse un pelo ni fijarse en que ha puesto todo perdido, y yo, solo por si cogía la indirecta he rodeado esa plancha con papel de periódico, y tan feliz y ya con el papel de periódico ha vuelto a cocinar y dejar los periódicos allí con más grasa (si cabe) que antes. Vale, ya me estais liando, que estábamos con lo de mis putos euros. El pasado viernes con mi paga extra en el bolsillo y más contento que un cuco por mi "reciente recuperación económica" comenzaba a calentarme la mente con comprar algo de ropa, pensar en alguna salida en vacaciones, o incluso comprarme un nuevo objetivo para la cámara, y tal cual el cuento de la lechera, al día siguiente "¡¡zas!! En toda la boca". El botín asciende a cerca de los 1800 euros, de golpe y plumazo. Teniendo en cuenta que ya he repuesto el ordenador, ya se me ha ido la paga extra, y sigo sin cámara de fotos, que será el siguiente gasto y ya tendré que meterme yo en pagos a plazos y tonterías de estas.

Y es que ser pobre es una jodienda. Así que tendré que tomar decisiones drásticas, tales como vender mi cuerpo. Lo que ya no sé, es que si dejando el gimnasio, por aquello de ahorrar rápidamente, con este cuerpazo que tengo, si me contratará alguien. Quizá me termine haciendo un banner en este mismo blog, que de seguro habrá quien pague por ello. O bien, continuamos con la subasta de esas fotos de Pimpfito encima de la carroza.... Lo que no sé yo es que hará Esperanza Aguirre para solucionar lo suyo, bueno, lo suyo no, lo de la suma de todos, que eso es Madrid, la suma de todos.