Un salto geográfico-temporal

Cuando todos os imaginábais un post genial sobre un bloguero que viaja en el tiempo y es trasladado a otro lugar, algo muy propio de Iker Jiménez, voy yo y nuevamente en un arranque de mi grandeza os digo que el post es algo mucho más sencillo que todo eso. Y así, muy de callado y sin hacer mucho ruido, sin aviso previo a mis blogueros, os anuncio que he pegado un salto geográfico-temporal como quién no quiere la cosa, algo muy sencillo que ni tan siquiera el mismísimo Julio Verne habría podido imaginar, total, se consigue haciéndose 600 kilómetros de coche, volver a tu pueblo de Galicia y disfrutar de una fiesta medieval al gusto, de esos que te retrotraen a algo más de 500 años atrás, a la época de los Reyes Católicos.

También advierto que este post de mi viaje a Galicia no tiene nada que ver con una crítica política al gobierno de Feijoó, que se permite ya, sin la menor tribulación reirse del propio gallego y en documento oficial citar a la Xunta de Galicia como "Junta de Galicia". Ni quiero que penséis que este paso atrás es algo lingüístico a una de las zonas que siempre han sido consideradas como las más deprimidas de España, las PIGS de las autonomías, mi Galicia. Pues nada de eso, que Galicia, aunque atrasada históricamente incluso tiene autopistas, de las más caras de España eso si, pero las tiene, y parte de ellas me las he recorrido est fin de semana, total, para ir a esa fiesta de mi pueblo, una fiesta de interés turístico nacional, ahí es nada.

Chuchis, yo en mi calendario tengo marcadas varias fechas intocables, las navidades son unas de ellas, para disfrutar en el pueblo y con la familia, las vacaciones de verano que ya se verá que sucede cada año pero que son las mejores fechas para disfrutar de la masificación de mi pueblo, y la fiesta medieval. A la fiesta medieval no he faltado nunca desde que tengo uso de razón, y qué queréis que os diga, para mi es lo más divertido (y cansado) que conozco. Un fin de semana exprés, aunque he pedido un día más para volver a Madrid descansado y con las fuerzas recuperadas, unos días de reencuentro con los amigos que volvemos por tan celebrada fecha, de muchos vinos, cervezas, bocatas de chorizo, pulpo, tortilla (para quiénes gusten), tapas de pez espada,  y los más variados postres, lo ideal para comenzar la operación mondongo que advierto será a la vuelta del fin de semana.

Es por ello que os he dejado una serie de post de esos que se hacen con antelación y que nada tienen que ver con la más rabiosa actualidad a la que estáis tan acostumbrados si leéis este blog. Mientras os pasáis por este blog el fin de semana yo estaré de fiesta, con mi disfraz con pluma incluída y del que si cabe os pasaré alguna foto, aunque eso lo veremos más adelante.

Bicos Ricos

P.D.: Angelillo, cuándo leas esto, cari, que sepas que me pasaré por esa capilla tan bonita que tenemos ahí en el centro del pueblo y que disfrutaré, probablemente allí de un concierto de cuerda con instrumentos medievales a los que yo no podría poner nombre, entre ellos la zanfoña y similares.