¿Os pensábais que tener un novio imaginario era algo complicado? Pues bien, en muchas ocasiones es algo muy práctico. Ya lo he contado más de una vez, pero sobre todo cuando uno necesita mimos y cariño, y un brazo que te rodee, tener a alguien como Fabián es lo mejor, y ya si se trata de piropearte, lo nunca visto. Ya más complicado es lo de hacerse un masaje en la espalda, pero a este tipo de cuestiones anatómicas no me quería referir en este post de sábado.
He aprovechado que tengo visitas en casa, y que yo estoy cansado y pobre para utilizar a Fabián y que éste haga de guía turístico. Y es que mi Fabián, aunque de Avilés, en el poco tiempo que lleva aquí se conoce Madrid con la palma de la mano, como si tuviese un GPS incorporado y la Wikipedia, todo junto. Así que cuando ha llegado esta pareja de amigos heterosexuales del pueblo que están casados les he presentado a mi Fabián, lo he presentado como "el médico del sitio donde trabajo", y no les he dicho que es mi novio porque, aunque sea imaginario, a mi no me gusta hablar de mi vida privada, ni de política, y a Fabián ni te cuento. Mi amiga se presentó con una sonrisa, y su marido puso cara de pocos amigos. Normal, chuchis, los celos, y es que mi Fabián lo vale, no os imagináis su musculatura, aunque ya he mencionado en alguna ocasión que ni le falta ni le sobra. Está en su punto. Pero lo fuerte ha sido cuando se lo he presentado a mis dos amigas solteras, las que duermen en mi casa. A estas se les han puesto los ojos como platos, y entre ellas se daban pequeños codazos. Pequeños codazos al principio que me tenían desconcertado y no sé si es que no colaba aquello de que Fabián es el médico de mi trabajo, o si somos amigos, o si somos pareja, o lo que pensaban.
No he tardado tiempo en darme cuenta de lo que sucedía. Mis amigas no se enteran de que va la película. No se enteran de nada, ni aunque las saque por Chueca, ni que les presente a D., ni que me suba en una carroza en el orgullo y duerma con mi ex. Ellas están a otras cosas. Claro que están a otras cosas. En esta ocasión a levantarme a mi Fabián. Que no me he llegado a poner ni celoso ni nervioso, porque sé que Fabián me quiere un montón, y entre otras cosas él no es bisexual y es gay, de cabo a rabo, sobre todo de esto último, de rabo. Pero no entremos en este tipo de bajezas. Se han enamorado de mi Fabián al instante. No han parado de hacerle preguntitas sobre Madrid. Pero si estábamos en la Puerta del Sol y hasta le han preguntado que dónde estábamos. Como si no lo supiesen, como si no saliese la Puerta del Sol todos los años con las campanadas. Intentadlo, bonitas, es lo que me decía mi pasajero rosa a la vez que me salía un esbozo de sonrisa. ¿Y dices que tu amigo Fabián este que está tan musculoso, que a ver si se te pega algo, es de Avilés? ¿Vamos a ir a visitarlo a Asturias? Me preguntaba una de ellas como adolescente con una carpeta cubierta de fotografías de sus ídolos, o como un gay en la puerta de un cuarto oscuro antes de entrar, o peor aún, como cualquiera de los que están sentados en en Mamá Inés mientras observan a alguien nuevo entrando en la cafetería. No han parado de hablarme de él, a todas horas, de preguntarme si estaba soltero (aunque les mentí), su edad, dónde vive, con quién se acuesta. Preguntonas, coño, frescas, más que frescas.
Ilusas. Fabián me quiere solo a mi. Ello no quita se sea el novio imaginario perfecto y que sea el mejor guía del mundo, y todo para que su cari, su Pimpfito pueda estar un poco más a gusto y relajado estos días.
(8) Celos, son puñales que se clavan en el fondo de mi alma y me van a destrozar. Celos, que son más que una locura, que me hunde en la amargura... (8)
ResponderEliminarTiene ser divertido que tus amigas intenten ligarse a tu novio imaginario, no me creo que con todos esos matices no se den cuenta aún jajaja
Un besazo cari
Igual tendría que buscarme un novio imaginario para estas frias noches invernales. No te voy a quitar a Fabián, tal como han intentado tus amigas ¿imaginarias? jajaja... pero si tuviese un hermano o un amigo...
ResponderEliminarUn beso (real)
Yo no estoy para novios, ni imaginarios ni reales, pero para lo que sí estoy es para follamigos o polvos de una noche, aunque por favor, que sean reales.
ResponderEliminarA estas alturas, creo que el resto de mi vida estará llena de novios imaginarios jajajajajaja. Cariños Pimpf.
ResponderEliminarSi es gay 100% puedes dormir tranquilo que ni aunque fuese la mismísima scarlett johansson le pondría, ahora si tu fabian fuese bisexual, pues... depende de lo fiel que te sea XD
ResponderEliminarBsos
Para que no sigas teniendo en el futuro problemas con to novio imaginario,te aconsejo que solo se lo presentes a a amigos imaginarios.
ResponderEliminarAbrazos.
En eso de la imaginariedad de FABIÁN tienes otra ventaja, que te lo puedes imaginar como quieras ¿como el de la foto, quizás? Sí es así, mándamelo a GRANADA como tu representante plenipotenciario, ya que tu no vienes, jejejeje... le enseñaré GRANADA, ya que como dices, es tuyo y solo tuyo, y yo a los novios imaginarios los respeto, lo mismo que al perro invisible de mi hermano, cuando era pequeño, que yo era el único en hacer esfuerzos por no pisarlo o no tropezar con él...
ResponderEliminarjajajaja me has hecho reir, y que paso por que solo es imaginario?? pues parece que le quieres meter diente! que esperas!!?
ResponderEliminarFrantasma, al ser Fabián imaginario puedo esconderlo mejor que al real, basta con que no piense en él.
ResponderEliminarParmenio, mis amigas son reales, aunque fantabulosas, jajaja, pero no sé, empiezo a sospechar ya que me quieres quitar también a Fabián.
Christian, ¿somos amigüitos? jijiji
G-boy, se pueden tener infinidad de novios imaginarios, pero siempre mejor tener uno real por ver las cosas de distinta forma.
Xas, bueno, en mi mente lo he idealizado como gay 100%, pero no sé, mismo me he equivocado.
Antony, eso nunca! no puedo presentarle a más chicos, que me complicarían la existencia imaginaria.
Observatorio, a veces, los que se crean personajes imaginarios, están poniendo a prueba a los reales, mira si no a tu hermano...
Gary, es mi novio imaginario... ya le he metido el diente y más cosas... jajaja
Bicos Ricos